Perro rescatado de un cañon.

El 20 de junio del 2010, Zak Anderegg paseaba por el desierto de Arizona. Intentaba cruzar un cañón con más de cien metros de profundidad cuando encontró algo inesperado.

En esas profundidades, era necesario equipo para poder salir. Zak estaba preparado para cruzar el cañón, pero no para lo que encontró en el fondo. Resulta que un cachorro había sido abandonado por un inconsciente, dejado ahí sin salida para que muriera de hambre o de sed. El animal se encontraba en condiciones deplorables, y era obvio que no le quedaban muchas horas de vida.

Sin embargo, el terreno era difícil y no había manera de que Zak se acercara al cachorro. Lo único que pudo hacer fue bajarle comida, agua y una cobija. Al otro día regreso mejor equipado y gracias a una enorme convicción, llegó al cachorro y lo rescató. Pero no todo terminaba ahí, el perrito tenía una severa deshidratación y estaba muy bajo de peso. Cuando lo llevaron al veterinario, no estaban seguros de que sobreviviría.

Ahora, cuatro años después, el cachorro se ha convertido en un enorme y feliz perro llamado Ryan. Ambos, dueño y perro, hicieron un esfuerzo mayúsculo para estar juntos, y lo lograron. A pesar de la cruel vida que tuvo cuando era un cachorro, ahora Ryan es una mascota feliz y sana.

Según Anderegg “Riley se ha convertido en un miembro muy importante de nuestra familia, es uno de los perros más dulces que he conocido. Fue una suerte increible que lo haya visto y estoy muy agradecido por eso".
Este el el video de su rescate y rehabilitación.