Gobi, la perrita que se le unió en pleno maratón a un atleta, fue adoptada por el corredor




Dion Leonard es un atleta que corría una maratón en el desierto de Gobi en China y que encontró a una fiel compañera peluda que lo acompañó durante todo el trayecto.

Durante el transcurso de una semana, Gobi corrió cuatro de las seis etapas de la carrera donde participaba Dion. Él recuerda que en un momento dado, se vio obligado a llevar a la pequeña a través de un tramo del río. Fue entonces cuando sintió que había un vínculo real entre ellos dos. 

El atleta llamó inmediatamente a su esposa y discutió la posibilidad de llevar a Gobi a casa. Pero ella tenía que pasar por varias cuarentenas, tanto en China como en el Reino Unido antes de estar finalmente con Dion.

Pero una triste noticia le llegó a Dion, Gobi había desaparecido y llevaba más de una semana perdida.

El atleta estaba desesperado cuando se enteró de la desaparición de su amada Gobi, he hizo un llamado para que le ayudaran a encontrar a aquella perrita sin hogar que le valió la fama en todo el mundo después de correr 125 kilómetros a través de China a su lado. 

Dion voló de regreso a China para buscarla. Lanzó una campaña, habló a los medios de comunicación social y puso carteles por toda la ciudad. Los voluntarios ayudaron también preguntando a los guardias, taxistas, limpiadores y vendedores de fruta; visitaron parques y refugios para perros; y hablaron con cualquier persona que pudiera haber visto a la perrita.

La televisión local entrevistó a Leonard, y los residentes lo detenían en la calle para preguntar que estaban buscando y llorando por la historia. Dion dijo que incluso puso en marcha un blog para actualizar a la gente acerca de la búsqueda.

En el fondo de su corazón, Dion temía que sería una búsqueda infructuosa, pues Urumqi, la capital de Sinkiang es una gran ciudad de 3 millones de habitantes, y temía que Gobi, incluso pudiera haber corrido de nuevo al campo, donde se habla la lengua uigur (lenguaje hablado por un grupo étnico que vive en las regiones del noroeste de la República Popular China, principalmente en la Región Autónoma Uigur de Sinkiang). Los uigures no utilizan medios sociales y era probable que ni siquiera fueran conscientes de la campaña.

Pero un día, un hombre chino llamó a Dion avisándole que él y su hijo habían visto a un pequeño perro perdido en un parque local, mientras paseaban a su propio perro. 

Ellos se habían llevado al perrito a su casa y pensaron que podría ser ella. Pero después de un par de falsas alarmas, Dion se mostraba escéptico. El hombre envió fotos, pero la iluminación no era buena. “Al entrar en la habitación, yo pensaba que no iba a ser Gobi”, dijo Dion a The Washington Post. “Entré en la habitación, y no dije una palabra. En realidad había unas 10 personas en la sala. Pero tan pronto Gobi me vio, corrió hacia mí. Saltaba en mi pierna y saltaba sobre mí y aullaba de alegría”.



“Fue simplemente alucinante pensar que la habíamos encontrado”, dijo él. “Fue un milagro”.

Leonard consiguió cerca de 20.000 libras, a través de una campaña de crowdfunding para cubrir los costos de llevar a Gobi de vuelta a Gran Bretaña, y más de unas 9.300 libras para financiar la búsqueda.

Él agradeció a todas las personas del mundo que lo habían apoyado, y en especial a la gente de Urumqi, cuya respuesta, dijo que había sido abrumadora.

“La cantidad de personas con las que hice la búsqueda, las salidas desde las 6 de la mañana hasta la media noche tratando de encontrarla, todo fue absolutamente increíble”, dijo Dion.

Y para no volver a pasar por un susto, el atletan decidió quedarse en China todo el tiempo que sea necesario, para asegurarse de que todo está bien con Gobi y pasada la cuarentena, pueda llevársela a casa.








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