Rogerio, el amigo de los animales.

"La grandeza de una persona, puede ser juzgada

por el modo en que trata a sus animales".- Gandhi

Rogerio es un hombre brasileño sin hogar, que vive en una carreta con 10 perros, algunos de ellos se encontraron en condiciones realmente malas: golpeados por los antiguos propietarios, tirados por la ventana de un camión, enfermos, hambrientos, amarrados a un poste, entre otras atrocidades.

Rogerio vive donaciones de alimentos y medicinas. Los perros que tiene son muy bien tratados, y reciben grandes cantidades de amor y afecto. Los perros no hacen daño a nadie, son muy educados y amables, y pasan la mayor parte día en el interior de la carreta.

Este noble señor es muy querido por los comerciantes de la región, pero el problema es durante la noche, donde los borrachos y usuarios de drogas en la región, han sido una amenaza constante. Rogerio ya ha sido golpeado por los adictos a las drogas y el alcohol. Sin embargo, nunca deja de ayudar a los animales.

¿Cuántas veces no hemos escuchado a personas decir: "Lo adoptaba, pero ya tengo 2 perros", "Es que no tengo dinero", etc.? Y es válido, todos debemos de ayudar por convicción y no por obligación, pero esos argumentos que dan para no ayudar, francamente solo suenan a pretextos, y ejemplos como el de Rogerio, nos demuestran que a pesar de su situación y habiendo podido elegir otro tipo de vida, siempre ha demostrado coraje y sobre todo, gran valor. Su presencia ilumina los lugares por los que pasa.

A veces las palabras no alcanzan para definir la grandeza de un alma como la de Rogerio, quien materialmente hablando, casi no tiene nada y lo poco que le llega lo ocupa para aliviar la difícil situación de estos perritos sin hogar.

Esta historia nos deja la enseñanza que lo más importante, no es la riqueza y el poder, sino nuestras actitudes y valores éticos y espirituales.