¿Los perros necesitan protección solar?



El sol no sólo es un peligro para las personas, también lo es para los animales. Algunas razas de perros y gatos corren riesgo de insolarse. 
Pero antes de que empieces a embadurnar a tu pastor alemán con loción factor 50, ten en cuenta que no todas las mascotas sufren por igual los efectos del sol.

El sitio Science Daily recopila las recomendaciones de la dermatóloga Christa Horvath-Ungerböck, de la Universidad de Medicina Veterinaria de Viena. La experta indica que, al igual que los seres humanos, los animales con poco o nada de pigmentación en la piel son muy sensibles al sol en general. También aquellos con pelo muy corto pueden ser más vulnerables.

Según Horvath-Ungerböck, el Dogo Argentino, el Bulldog blanco, el Dálmata, el Bóxer, el Whippet, el Beagle y los gatos de varios colores con manchas blancas, tienen una piel sensible a la luz, especialmente en sus cabezas.

Por otra parte, hay enfermedades o condiciones de salud que pueden aumentar el riesgo. “Entre los perros en peligro de quemaduras solares se incluyen aquellos que experimentan pérdida del pelo debido a alergias o cambios hormonales”, explica la Dra. Heather Peikes, dermatóloga especialista en veterinaria, en el sitio Dogster.



¿Cómo protegerlos?

- Evita rapar a tu mascota en verano, porque estarás exponiéndola al daño. Puedes recortarle el pelo, sin caer en el extremo de esquilarla.
- Procura que cuente con un espacio sombreado. Si tu animal es naturalmente un amante del sol, no lo dejes retozar al aire libre durante horas. Llévalo al interior del hogar.

- Elige un protector solar adecuado. Si es un producto para personas, debería ser seguro para los bebés, indica Peikes, y no contener óxido de zinc, que podría ser tóxico para los animales. El sitio del Hospital Banfield de Mascotas aconseja emplear lociones especialmente diseñadas para mascotas, sin fragancia, resistentes al agua,
 bloqueadoras de rayos UVA y UVB, y con un factor de protección solar de 15 o más.

Aplica el protector en las zonas vulnerables. Además de las orejas y el hocico, que suelen ser las regiones más expuestas al sol, la institución mencionada incluye el abdomen y las patas como áreas potencialmente sensibles. Evita el contacto con los ojos, y reaplica la loción cada tres o cuatro horas. Discontinua su uso si tu mascota presenta urticaria o sarpullido.

- Vístela. Para paseos largos en lugares como la montaña, donde los rayos del sol son particularmente agresivos, Horvath-Ungerböck aconseja cubrir a los animales más sensibles con una camiseta, una capa o un sombrero.

Ante cualquier duda, ¡consulta con el veterinario!




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