Perrita sin hogar se convierte en cliente frecuente de una cafetería
La cafetería de Dulci Barbosa ubicada en Brasil, tuvo que cerrar debido al aislamiento preventivo por la actual pandemia. A pesar de cerrar sus puertas, Dulci nunca dejó de servir las comidas para su cliente más especial, una dulce perrita llamada Deneres.
Esta pequeña comenzó a visitar la cafetería desde el año pasado, y desde la primera vez fue recibida con buena atención, con el tiempo se convirtió en un cliente frecuente.
Dulci, la dueña de la cafetería, es toda una amante de los animales, de hecho ya tiene 3 perros rescatados en casa, por lo que no podía brindarle un hogar a Deneres. Sin embargo, esta mujer de tan buen corazón se aseguraba todos los días de que la pancita de la dulce perrita, siempre estuviera llena.
Era tanto su empeño por alimentarla, que incluso cuando tuvo que cerrar su negocio, siguió yendo todos los días solo para dejarle comida.
"Ella nunca pasó hambre. Yo era la única persona con la que podía contar", declaró Dulci.
En poco tiempo, la perrita llegó a considerar a Dulci como algo más que su proveedor de alimentos; la veía como su mejor amiga.
Con el final del confinamiento, la mujer finalmente pudo abrir su negocio, y Deneres fue uno de sus primeros clientes. La perrita, llegó muy ansiosa y contenta al lugar, y se dirigió directamente a saludar a Dulci, con un exagerado movimiento de cola.
Desde entonces, Deneres ha vuelto a su rutina diaria de visitar la cafetería donde recibe mucho amor, cuidados y una buena comida.
"Tengo un gran amor por ella. Y creo que el sentimiento es mutuo", comentó Dulci.
Aunque la mujer no sabía dónde Deneres pasaba la mayor parte del tiempo, era muy evidente que no vivía sola. Su cuerpo mostraba varios signos que insinuaban que había estado amamantado a una camada de cachorros, y probablemente aún los tenía bajo su cuidado.
Un día, la perrita finalmente se sintió cómoda y segura como para hacer una adorable presentación a su mejor amiga. Entonces, justo después del desayuno, la perrita llevó a Dulci, directamente hasta donde estaban todos sus lindos bebés.
"Estaba muy feliz. Pensé: ‘ahora toca rescatarlos y darlos en adopción'", dijo Dulci.
Por lo pronto, lo primero que hizo la mujer fue llevarles una deliciosa y agradable comida a Deneres y su pequeña familia.
Desafortunadamente, los animales en situación de calle son más comunes de lo que parece en la región donde trabaja y vive Dulci. Pero ella está haciendo todo lo posible para que esta adorable familia no sea pasada por alto y puedan ayudarla de la mejor manera.
Así como se comprometió en alimentar a Deneres todos los días en su café, ahora siente que su deber es encontrarles un hogar para siempre a todos.
"Ya comencé campañas para que se adoptaran. Lo haremos. Estoy segura de que les encontraremos un hogar", finalizó Dulci.
Si quieres estar al tanto del futuro de Deneres y sus cachorros, sigue la cuenta en Instagram de Dulci.
Leave a Comment